Voto anómalo y segmentación social en las elecciones a diputados federales de 2024
Julio 2025
Salomón Guzmán

El estudio del voto anómalo ofrece una vía crítica para identificar patrones electorales atípicos, inconsistencias geográficas y fracturas sociopolíticas que escapan a los promedios agregados. En el proceso electoral mexicano de 2024, el análisis de 69 mil 763 secciones electorales, agrupadas por clase social, reveló profundas segmentaciones en la preferencia electoral hacia los tres principales partidos: PAN, Movimiento Ciudadano (MC) y Morena. A través de una comparación con los promedios de voto por clase social, se identificaron anomalías positivas y negativas que permiten trazar un mapa sociopolítico más nítido del país.
¿Qué es el voto anómalo y cuál es su propósito? El voto anómalo es aquel que se desvía significativamente del comportamiento electoral promedio esperado para un grupo social, territorio o partido. En otras palabras, es un voto que rompe con el patrón estadístico general dentro de una categoría específica, ya sea porque es mucho más alto o mucho más bajo de lo habitual en una determinada región o segmento poblacional. En este caso, se identificaron anomalías al comparar el voto observado en cada sección con el promedio de votos del mismo partido dentro de su clase social. Esto permite detectar secciones donde el comportamiento electoral es atípico respecto a su entorno inmediato.
El análisis del voto anómalo tiene múltiples propósitos: detectar zonas de sobrerrepresentación o subrepresentación política, revelando bastiones electorales o zonas de rechazo; identificar fracturas sociales y territoriales en el voto, como la segmentación por clase social; detectar comportamientos estratégicos o inducidos, como movilizaciones selectivas o clientelismo; apoyar la estrategia política y electoral de los partidos, ayudándoles a entender fortalezas y debilidades; fortalecer la vigilancia electoral, ya que una alta concentración de anomalías puede alertar sobre irregularidades o falta de competencia real.
En el contexto mexicano, con su compleja diversidad social, económica y territorial, el análisis del voto anómalo permite comprender con mayor precisión quién se siente representado por qué partido, y qué segmentos sociales han sido incorporados o excluidos del sistema político.
El análisis muestra que cada partido presenta patrones diferenciados de anomalías positivas y negativas al interior de las distintas clases sociales, lo cual revela estructuras profundas de representación y rechazo electoral.
El PAN tiene una presencia significativa en la clase alta urbana (5 mil 584 anomalías positivas) y también logra cierto empuje en la clase media urbana (6 mil 111 positivas). Sin embargo, en ambas clases, las anomalías negativas son aún mayores, lo que sugiere polarización interna incluso en sus nichos naturales. Sufre un rechazo estructural en zonas como la clase baja rural (11 mil 085 negativas) y media rural (5 mil 369), en donde los promedios de voto caen por debajo de 100 votos por sección.
Movimiento Ciudadano muestra brotes positivos en la clase media urbana (5 mil 646 positivas), pero también una abrumadora cantidad de anomalías negativas en ese mismo grupo (12 mil 049), lo que indica inestabilidad electoral. En zonas rurales y clases bajas, también predomina el rechazo. MC parece atraer un voto urbano aspiracional, pero aún no logra convertirse en opción dominante en ningún grupo social.
Morena presenta un patrón más equilibrado, con anomalías positivas altas en clases bajas y medias, tanto urbanas como rurales. Destaca su desempeño en la clase media urbana (6 mil 178 positivas), aunque también ahí comienza a aparecer un desgaste importante (10 mil 896 negativas). Su mayor fortaleza está en la clase baja rural, con 5 mil 198 anomalías positivas. Sin embargo, el rechazo en la clase alta urbana sigue siendo fuerte (11 mil 483 negativas).
Los datos sugieren que la representación política en México está cada vez más segmentada por clase social y territorio. Mientras que el PAN conserva nichos en sectores urbanos privilegiados, Morena mantiene hegemonía en zonas empobrecidas y rurales. MC aparece como una fuerza intermedia en busca de consolidación. Esta polarización amenaza con acentuar la fragmentación política y la imposibilidad de construir proyectos comunes a nivel nacional.