Otra vez

Por Jorge Camacho Peñaloza.

“Sería magnífico, yo creo, ayudar a hacer de México un lugar feliz”:

Pancho Villa

 

Hablemos claro: el problema de la inseguridad pública y violencia que actualmente ha sembrado terror en la sociedad proviene de la transición delincuencia común-delincuencia organizada, de los ladronzuelos y carteristas a carteles de la droga y crimen organizado, que controlan el cultivo de amapola y mariguana (producción, trasiego y venta de droga), así como la comisión de secuestros, extorsiones y trata de blancas. Si bien la seguridad pública es una responsabilidad de los tres órdenes de gobierno, la delincuencia organizada es un delito de orden federal que corresponde a este ente atacarlo y combatirlo. Si la violencia, homicidios e inseguridad pública que vivimos en Guerrero proviene de la delincuencia organizada, entonces quien tiene primordialmente la responsabilidad de combatir el problema en el estado, son las dependencias del gabinete federal encargadas de la seguridad. Ni el estado ni los municipios tienen atribuciones para investigar y perseguir delitos federales, como la delincuencia organizada, esa es facultad del Gobierno federal. Entonces, si hay violencia, inseguridad extrema y delincuencia organizada campeando por todo el estado de Guerreo, es responsabilidad de las dependencias u órganos de seguridad federales, no del estado o municipios. El argumento de la coordinación entre los tres niveles de gobierno sólo sirve para diluir y rehuir la responsabilidad del Gobierno federal con respecto al problema de la violencia e inseguridad derivadas de la delincuencia organizada. Si actualmente Guerrero es de los estados más violentos del país y Acapulco y Chilpancingo de las ciudades más violentas y menos seguras, es, por ende, por la inoperancia, ineficiencia o desinterés de las dependencias federales. ¿Por qué? Pues porque no se ve claro cuál es la estrategia o las acciones sistemáticas públicas o cerradas de estas dependencias contra la delincuencia organizada, no se ven, ni las directas ni las preventivas, no hay. No se ve coherencia ni lógica operativa, comunicativa ni preventiva. Se ve la libertad en las calles, zonas y vialidades para delinquir, se ve a jóvenes ingiriendo bebidas en la vía pública, bares infringiendo los reglamentos, colonias desoladas, ausencia de puestos de revisión y control, rondines, coordinación, nada. De las estrategias confidenciales ni hablemos, creo que son inexistentes. No puede ser que los miles de elementos, altos rangos militares y navales, cuarteles, armamento de batallones completos, la Policía Federal y de la gendarmería, los órganos y áreas de inteligencia, más la coadyuvancia de las corporaciones estatales, no puedan contra un grupillos de delincuentes. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, ENSU del INEGI, las ciudades de Acapulco y Chilpancingo ocupan el tercero y quinto lugar, respectivamente, de los cinco municipios donde los ciudadanos tienen la peor percepción de seguridad en todo el país. En el informe dado a conocer el martes 12 de junio, se señala que durante este mes las ciudades con mayor porcentaje de personas de 18 años y más que consideraron que vivir en su ciudad es inseguro son: Villahermosa, Coatzacoalcos, Acapulco, la región Oriente 2 de la Ciudad de México y Chilpancingo, con 95, 94, 93.5, 91.2 y 88.6 por ciento, respectivamente. A la par de esta realidad, tan sólo el 8.8 por ciento de la ciudadanía encuestada en Chilpancingo, para ocupar con ello el penúltimo lugar a nivel nacional, sólo después de la zona oriente de la Ciudad de México, y no muy alejado de Acapulco que sólo alcanzó el 17.6 por ciento, califica el desempeño del gobierno municipal como efectivo para resolver los principales problemas de la ciudad. En cuanto a la efectividad del desempeño de diferentes corporaciones policiacas para prevenir y combatir la delincuencia los resultados fueron: 62.2 por ciento para la Gendarmería Nacional, 58.2 para la Policía Federal, 46.2 para la Policía Estatal y 42.8 para las policías municipales. Así las cosas, Chilpancingo y Acapulco otra vez salen, sobresalen como las ciudades en las que sus habitantes se perciben más inseguras. Esto es porque no hay un combate contundente y decidido contra la delincuencia organizada por parte de las instancias responsables, gracias.   Jorge Camacho Peñaloza fue candidato al gobierno de Guerrero en 2015. Twitter: @Camacho_Jorge