Municipios fronterizos en México, un reto en materia de derechos humanos

La nación mexicana es reconocida por ser una ubicación de origen, tránsito, destino y retorno migrante, las condiciones que empujan a una persona a cambiar su lugar de residencia son muy diversas y es la búsqueda de una mejor condición de vida uno de los principales factores.

Realidad en las fronteras mexicanas

Cientos de migrantes, en su mayoría centroamericanos, deciden realizar su travesía por el país para llegar a las fronteras de Estados Unidos. Para 2019, de acuerdo con datos de la OIM, la nación vecina al norte continúa siendo el principal destino migratorio con alrededor de 51 millones de migrantes, lo cual indica que ahí se concentra más de la mitad del total internacional de migrantes.

México posee dos grandes fronteras, al norte y al sur de su territorio, con los países de Estados Unidos de América, Guatemala y Belice. En este sentido, los estados que forman parte de estas fronteras son: al norte, Baja California, Sonora, Chihuahua, Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, y al sur: Chiapas, Tabasco, Campeche y Quintana Roo, siendo estas entidades donde se percibe fuertemente el flujo migratorio.

Ahora bien, en el orden municipal, las demarcaciones locales con mayor flujo migratorio son: al norte, Ensenada, Tijuana, Mexicali, Nogales, Ciudad Juárez, Piedras Negras, Matamoros, Nuevo Laredo, y al sur: Amatenango de la Frontera, La Trinitaria, Suchiate, Motozintla, Palenque, Marqués de Comillas, Ocosingo, Tapachula, Tuxtla Chico, Unión Juárez y Las Margaritas, Calakmul, Candelaria y Othón P. Blanco, Balancán y Tenosique. Estas demarcaciones locales terminan funcionando como zonas de tránsito y en muchos casos lugares de estadía temporal y/o permanente cuando los migrantes no logran llegar a su destino.

En la siguiente tabla se concentran los 20 municipios con mayor porcentaje de flujo migratorio, lo cual nos indica el dinamismo de los migrantes que buscan mover su lugar de residencia de manera temporal o permanente.

El cálculo de la tabla se hace a partir de 2015 y hasta 2020, en dónde podemos observar que ocho de los enlistados pertenecen al estado de México, seguido de Quintana Roo y Jalisco con dos municipios respectivamente. Con esto podemos inferir que los municipios fronterizos no sólo se ven expuestos a la cantidad de centroamericanos que cruzan por el país, sino también por los propios mexicanos que emigran.

Sobre esta misma línea la COMAR (Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados) ha reportado en varias oportunidades que Chiapas concentra el 72 por ciento de las solicitudes en el país, y Tapachula es el municipio con más casos: 31 mil 584 hasta agosto de este año, correspondientes a 55,005 personas.

Durante 2020 se empezaron a recibir más solicitudes de personas originarias de Honduras y Haití, cuando en años anteriores la mayoría de migrantes que llegaban a México eran originarios de Centroamérica y Cuba. Para inicios de 2020, el INM indicó que del 1 de enero al 31 agosto se había identificado a 147 mil 033 personas migrantes en “condición irregular” en el país.

Programas

Actualmente, México no cuenta con programas establecidos para el apoyo de los municipios fronterizos. En el PEF aprobado para este ejercicio fiscal continúan sin aparecer aquellos programas que preveían este tipo de actividad en los gobiernos locales, tales como el apoyo 3x1 para migrantes, a través del cual se percibían hasta 300 millones de pesos para tratar este tópico. Dicho fondo fue creado en 2009 y promovía acciones y obras de infraestructura como una manera de crear oportunidades en las comunidades expulsoras y apoyar en la operación de albergues y retorno a los lugares de origen. En este sentido, el programa 3x1 para Migrantes concretaba diversos proyectos para vincular a mexicanos en el extranjero con sus municipios de cuna. El fin ultimo de programas como este se basaban en tres ejes principales:

1. Infraestructura social: para el establecimiento de redes de agua, drenaje, electrificación, mejoramiento urbano, rehabilitación de zócalos, parques, carreteras o banquetas, entre otros, en los municipios fronterizos y en aquellos donde mayor flujo migrante se registraba.
2. Servicios comunitarios: para la creación o mejora de espacios dedicados a otorgar servicios de salud, realizar deporte o celebrar eventos culturales, así como la creación o equipamiento de albergues.
3. Educativos: para construir infraestructura y equipamiento de escuelas públicas.

Además de estos, se destinaba cierta cantidad para desarrollar proyectos productivos que beneficien a comunidades donde hay una presencia importante de familias de migrantes.

Desafortunadamente la situación de pandemia global a complicado el estatus de los municipios fronterizos. El Gobierno federal actual no ha comprendido que para garantizar estabilidad en los municipios fronterizos y de los propios migrantes es necesario garantizar la existencia de canales de migración estables y de esta manera hacer frente a las diferentes demandas que surgen con esta problemática.

Desde la Asociación Nacional de Alcaldes

Exigimos que se elaboren programas que regularicen la situación de estos municipios, es necesario que se comprendan sus necesidades y las que deben atender con la presencia de la población migrante; garantizar el apoyo a estos gobiernos locales es garantizar las oportunidades para todos y todas, así como sentar las bases para regularizar la situación de estos municipios y quienes de origen o transito los habitan, garantizando la protección de sus derechos fundamentales.

Como parte de una comunidad internacional es necesario desarrollar los programas precisos para atender esta situación que tanto impacto tiene en nuestros municipios fronterizos y en aquellos con mayor flujo migratorio; el sentido humanista responde hoy a las necesidades políticas y sociales de nuestros tiempos, relacionando estrechamente su actuar con los derechos fundamentales y la búsqueda de la dignidad del ser humano. Creemos fielmente que la movilidad humana debe tratarse de una decisión personal y no de una necesidad. Municipios Fuertes para un México Fuerte.