La presencia de nuestros idiomas originarios
Septiembre 2025
Julio Faesler Carlisle

El pasado primero de septiembre, tomaron posesión de sus cargos los nuevos ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Al hacerlo figuraron por primera vez con relevancia las culturas prehispánicas dentro de una función del Poder Judicial mexicano.
Las ceremonias de purificación y de entrega de bastones de mando cedidas por varias comunidades autóctonas demostraron formas tradicionales que sobreviven, al lado de nuestros procesos judiciales, y que respaldaron la actividad de los nuevos ministros.
Sin duda el gobierno de la 4 T promovió esos extractos de la vida de los pueblos originarios con el claro propósito de contrapesar con ellos las fórmulas cívico religiosas acostumbradas pero que los sabios oficiales ven entrañablemente asociadas a su visión negativa de la conquista española de hace 500 años.
La finalidad netamente ideológica de la 4T explica su estrategia de promover trozos de usos y reglas autóctonas para sustituir fórmulas judiciales occidentales más antiguas y arraigadas en nuestra cultura mestiza.
Es precisamente, en razón de nuestra múltiple composición étnica que no se necesitan intenciones políticas para reconocer elementos importantes de nuestras culturas ancestrales que enriquecen la vida nacional.
En México se habla el náhuatl, la maya, el otomí, el rarámuri, el tzeltal, entre decenas de otras lenguas. Hay ejemplos latinoamericanos con el Paraguay, Bolivia, Perú, Ecuador y Brasil, donde el guaraní, el quechua y aimara son oficiales al lado del español y el portugués.
El que la instalación de los nuevos ministros de la Suprema Corte haya adolecido de serios vicios anticonstitucionales que justifican su anulación, no impide que reconozcamos la conveniencia de promover el uso de nuestro rico tesoro lingüístico en la vida cotidiana y desde luego difundir los principios y aplicaciones de la democracia.
El PAN debe promover un mayor número de individuos que manejen y usen los idiomas tradicionales y evitar con ello su desaparición. Lejos de ser visto como un elemento de división social como lo ven los identificados con la 4T. Nuestro partido debe entender los idiomas mexicanos como un ingrediente efectivo de unidad y concordia nacional.
Julio Faesler Carlisle es integrante del Consejo de Plumas Azules.