IA Más allá de los algoritmos, IA para todos

El libro salió este año por la editorial Planeta Colombiana y es una guía bastante útil y detallada para quien esté interesado en entender un poco mejor la historia, los usos, la regulación y los alcances de la Inteligencia Artificial en nuestro tiempo.

Los autores no sólo tienen credenciales en temas tecnológicos, además han tenido cargos y encargos en el gobierno de Colombia, tanto para implementar como para regular el uso de nuevas tecnologías, y en casi 240 páginas explican y detallan un mundo que es bastante ajeno para la mayoría de las personas, un mundo que tiene sus propias palabras, que tiene sus propios conceptos y que convive directamente con nosotros desde hace años querámoslo o no.

Es probable que más de una vez al año todos tengamos que resolver algún CAPTCHA para comprobarle a un sistema que está lidiando con un humano. Eligiendo las imágenes que nos indican o descifrando una serie de letras desordenadas resolvemos pruebas automáticas de Turing que sirven para separar a las computadoras y a los humanos.

Es común pensar que la IA es de reciente invención porque sólo atribuimos ese término para la nueva generación de programas que se desprende de la comercialización del ChatGTP entre 2022 y 2023, pero generar máquinas inteligentes que puedan replicar o superar la inteligencia humana es justo el fin de la computación desde su invención y para 1950 eso se llamaba inteligencia artificial. Para 1959 el concepto de Machine Learning o aprendizaje automático era la rama que permitía a las maquinas aprender de los datos existentes y mejorarlos para tomar decisiones o hacer predicciones. En 2017 se conceptualiza el Deep Learning que es una técnica de aprendizaje automático en la que se utilizan capas de redes neuronales para procesar datos, tomar decisiones y hacer predicciones, un año después, en 2018 surge el concepto de ChatGTP y para 2021 se consolida la inteligencia artificial generativa, que es la que puede crear nuevo contenido escrito, visual y auditivo a partir de indicaciones y datos existentes.

El libro inicia con una introducción a los principios básicos de la IA, cuestiones como las vistas en párrafos anteriores y algunos más desarrollados como la teoría de la mente, la inteligencia artificial autoconsciente y la importancia de los datos en la consolidación de este tipo de herramientas. El segundo capítulo es la historia que parte de Alan Turing y de la evolución de la computación a partir de la ciencia ficción que abre el sueño desde 1938, el desarrollo inicial a mediados del siglo pasado, las diferentes inversiones de gobiernos, el famoso episodio de Garry Kasparov derrotado por Deep Blue de IBM en 1997, los softwares de dictado (Dragon System, que muchos mal usamos en la educación básica) y hasta la suma de las tecnologías de última generación como el 5G, el Internet de las Cosas, el Big Data, el Blockchain y todo lo que en 2024 vemos con cierta naturalidad.

Los capítulos subsecuentes hablan de las aplicaciones de la Inteligencia Artificial en diferentes sectores e industrias. Comienza con los automóviles que se manejan solos y todo el catálogo de tecnologías que requiere dicho objetivo, con los temas de justicia y seguridad (incluso vienen ejemplos mexicanos aquí) y con las redes sociales, que es la influencia de IA más directa que tenemos más próxima. Explica cómo se han adaptado empresas de tecnología, de aeronáutica, de publicidad, de diseño y detalla una buena cantidad de herramientas que se pueden usar con meterse a sus páginas, pero no se queda ahí. Aporta ejemplos de la IA utilizada en nichos muy específicos, como el cuidado del medio ambiente, la salud, en los procesos electorales y democracias, la agricultura, la educación y la ciberseguridad.

Los siguientes dos capítulos son sobre riesgos, regulación, los derechos que implica, los posibles cambios que vengan, los dilemas éticos y el futuro. Además, la obra incluye un último capítulo de glosario que es bastante útil por incluir la mayoría de los neologismos tanto en inglés como en español.

La Inteligencia Artificial Generativa es a mi parecer el mayor hito tecnológico de la historia, y no está de más recordar que en menos de 50 años hemos pasado de la máquina de escribir a las computadoras controladas por el cerebro directamente. La Inteligencia Artificial que hoy vemos desarrollarse tiene dos capacidades que la alejan de cualquier tecnología anterior y que la ponen por encima de una “herramienta” para los seres humanos: puede tomar decisiones y puede interconectarse sin necesidad de intermediarios humanos, y una vez más, no se puede dejar de lado que lo que hemos visto hasta hoy es la “inteligencia artificial” más “tonta” que existirá en la historia. Conocer de qué se trata debe ser de interés para absolutamente todos, porque a todos nos afecta.

Julio Castillo López es Presidente de la Fundación Rafael Preciado Hernández.

X: @JulioCastilloL