Con honestidad y responsabilidad se alcanzará el verdadero cambio

Quiero empezar por decirles que México, tristemente, vive todavía una transición. De esta forma, Manuel Clouthier Carrillo analizó el momento que atraviesa nuestro país durante su participación en el evento titulado “México Hoy, el Cambio Urgente”.

Durante la reunión, celebrada el 20 de septiembre en la sede nacional del PAN, Clouthier Carrillo añadió que estar en un momento de transición significa pasar de un estado actual a un momento de futuro, en donde el futuro no está definido, sino que se define sobre la marcha.

Frente a militantes, legisladores e integrantes de la dirigencia nacional del PAN aseguró que al no tener un futuro definido sino incierto, en donde el pasado no muere y el futuro no germina, se obliga a los mexicanos a participar en dos órdenes:

“Lo primero que queremos saber es a dónde vamos, a dónde tenemos que ir. Y, lo segundo, emprender el camino y tratar de construir ese futuro, pero tenemos que hacer un trabajo profundo en la definición de a dónde queremos ir”, explicó.

Sobre esta premisa, precisó que parte del problema en México es que los ciudadanos no hemos sido capaces de definir ese futuro y mucho menos de ponernos de acuerdo sobre a dónde queremos transitar.

Y cuestionó: ¿les duele, nos duele a nosotros lo que pasa en nuestro país?, ¿nos duele cómo se atiende a la gente en los servicios públicos de salud en este país?

Si hay dolor significa que México tiene remedio. Si no existe dolor, pues ya no tiene remedio este país. Pero si nos duele debemos empezar a actuar en consecuencia.

Clouthier Carrillo recordó que en nuestro país se dejó de trabajar como se debía, pues la clase política comenzó a desear ser popular y ahí empezó a anidarse, en la política mexicana, el populismo, porque el populismo no es una ideología, el populismo es una actitud frente a la responsabilidad.

“El populista no quiere ser responsable, quiere ser popular, entonces, el político busca tener simpatía, desea tener una alta calificación de popularidad, aunque el gobierno sea un desastre, porque lo importantes es ser popular”.

De ahí, continuó, que los partidos ahora se dedican a buscar potenciales candidatos con una alta popularidad y se deja de hacer lo importante, porque hacer lo que corresponde normalmente no es popular y menos en un país como México, que año con año, por no hacer bien las cosas, se acumulan los rezagos.

Manuel Clouthier expuso que hay mucho que aportar para mejorar las cosas. No obstante, dijo, lo primero que dicen cuando llega una iniciativa desde el Poder Ejecutivo es “no le muevan ni una coma”.

Por eso hay mucho que trabajar, porque, en general, el ser humano necesita contrapesos, se necesitan límites, más cuando se tiene el privilegio de gobernar.

Sobre este punto, el sinaloense precisó que ser contrapeso no significa ser una barrera y que las cosas no avancen, no es ese el concepto: “sobre esta tesis la realidad es que toda propuesta es mejorable, en este país hay muchas cosas que necesitan mejorar y esto no se hace porque hay que ser populares”.

Asimismo, Clouthier Carrillo criticó que otro elemento importante en las sociedades democráticas son los medios de comunicación, sin embargo, hoy en día se encuentran en una crisis de cambio de época, padecen una crisis económica y entonces se replegaron, se enchufaron al poder y dejaron de ser contrapesos.

“Por otro lado, tenemos a otro de los contrapesos naturales: el órgano encargado de la vigilancia en una sociedad democrática debería ser la sociedad organizada. Y resulta que en México la sociedad organizada está desorganizada y débil, con fuertes problemas económicos, por lo que ha dejado de presionar y dejó de impulsarse la transición”, aseguró.

Finalmente, subrayó que si se quiere alcanzar una economía social de mercado se debe de tener un sistema de seguridad social fuerte, que hoy no existe, no nada más en el ámbito de los servicios de salud, sino en las pensiones, todos los fondos de pensiones en México están quebrados. “Al mexicano no le están diciendo que no está recibiendo el fondeo suficiente para pagarle su pensión de futuro y nadie quiere tocar ese tema porque es impopular decir que no hay dinero para su pensión”.

Así, afirmó, a la política y a México le urge más verdad y menos mentiras, urge más honestidad y menos corrupción, más respeto y menos abuso del poder, más responsabilidad y menos populismo, “más generosidad y menos egoísmo”.