Cómplice de la corrupción y la opacidad
Julio 2021
Andrés Castro Cid
El trabajo de Irma Eréndira Sandoval Ballesteros como titular de la Secretaría de la Función Pública fue francamente nulo, claudicó en su función, en las responsabilidades que la propia ley le otorgó, así lo aseguró Josefina Salazar Báez, diputada federal por el Partido Acción Nacional y miembro del Grupo Anticorrupción del GPPAN en la Cámara baja.
Luego del despido de la ahora ex funcionaria federal, la legisladora panista agregó que Sandoval Ballesteros no salió adelante en la responsabilidad que le fue encomendada y prácticamente se volvió cómplice de la corrupción, de la opacidad y de la mala administración que está haciendo el actual Gobierno federal del recurso público, tras permitir que el manejo se diera sin ninguna observación.
Josefina Salazar recordó que el Ejecutivo federal, en su campaña rumbo a la Presidencia de México, habló de que iba a combatir la corrupción, que terminaría con la impunidad, que habría cuentas claras, transparencia total y absoluta en el manejo del recurso público, que se terminaría con los compadrazgos, con los amiguismos, con las adjudicaciones directas, pero ahora vemos lastimosamente que le falló al pueblo de México con todas esas promesas incumplidas.
“La realidad es que el tema de la transparencia y la rendición de cuentas le pesa al presidente y esto lo vemos cuando declara contratos bajo reserva por 5 o 10 años, porque al presidente no le conviene que se sepa, por ejemplo, cómo se está gastando el dinero en la refinería de Dos Bocas, porque no le conviene al presidente decir cómo se está gastando el recurso para el tema del Tren Maya, en el aeropuerto de Santa Lucía. Vemos una completa opacidad y sin embargo se están destinando miles de millones de dólares en ese tipo de proyectos en medio de una situación de contingencia”, subrayó para La Nación.
Tras preguntarle si la salida de Eréndira Sandoval Ballesteros fue tardía ante la inacción de sancionar a malos servidores públicos, la también secretaria de la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación respondió que habrá que ver si este cambio es verdaderamente por una situación de resultados, que efectivamente el presidente no vio resultados en el trabajo de la hoy ex secretaria, o si es un tema meramente político, interno de Morena, como también se ha filtrado en algunos medios de una supuesta ruptura entre el presidente y la propia Irma Eréndira.
“Ya veremos, igual el tiempo fue el correcto para poder hacer el cambio, pero creo que no podemos echar las campanas al vuelo, tenemos que esperar resultados de la nueva persona que está propuesta para la titularidad de la SFP”, añadió.
Al hablar sobre el perfil y la experiencia en temas de transparencia y rendición de cuentas de Roberto Salcedo Aquino, quien tomará la titularidad de la Secretaría de la Función Pública, Salazar Báez destacó que lo importante en este tema es la independencia de criterio que pueda tener el nuevo titular, ya que tenemos a un presidente autoritario, que toma decisiones visceralmente, que arrastran a gran parte de su equipo; “a los que se han atrevido a cuestionarlo, pues mucho de ellos, inclusive, ya no están compartiendo con él la responsabilidad de la administración federal”.
Cuestionada sobre la posibilidad de presionar al gobierno desde el Poder Legislativo, la diputada por San Luis Potosí explicó que con la nueva conformación en la Cámara de Diputados, sin duda alguna, se tendrán mejores oportunidades para poder hacer este contrapeso.
“Pero aquí hay un factor importante que es mantener la unidad del bloque opositor, porque, aunque estaremos en mejores condiciones que en la actual legislatura, la realidad es que yo creo que la parte fundamental es mantener la unidad de este bloque para ser un verdadero contrapeso en la Cámara de Diputados”.
Al analizar la importante actuación de la sociedad civil en la lucha contra la opacidad del gobierno morenista, la legisladora potosina opinó que, sin duda alguna, en la medida en que haya sociedad civil informada y organizada, va a ser mucho más difícil para el presidente poder ir en contra de esto, porque a él lo que le interesa es ser popular y en la medida en que sus decisiones sean impopulares y la gente se organice para hacérselo saber, el presidente se va a sentir también comprometido o lo va a pensar dos veces.
“Es importante que la sociedad crezca, que haya cada vez más organismos de la sociedad civil que sigan cuestionando al gobierno, que sigan cuestionando a la Cámara de Diputados, por supuesto, que hagan propuestas desde la parte ciudadana y que trabajen de la mano para, entre todos, buscar mejores condiciones para salir adelante de esta grave crisis en la que nos encontramos”.