El liderazgo de las mujeres está comprobado
Octubre 2023
Kathia Bolio Pinelo
Hace unos días, nuestra secretaria de Promoción Política de la Mujer, Laura Esquivel Torres, refirió que “ninguna mujer en México debe condicionar su maternidad por su vida laboral y su pleno desarrollo económico o profesional”, ya que en México hacer política y ser mujer, en la mayoría de los casos, es una constante búsqueda del ejercicio paritario en la participación de procesos electorales y no siempre corresponde equitativamente en el verdadero derecho a ser tomada en cuenta de manera igualitaria.
Como mujeres nos enfrentamos a diversas tareas: ser esposa, madre o jefa de familia. Esto dificulta la determinación de participar en política, sobre todo cuando hay que sortear obstáculos históricamente arraigados como la discriminación y la violencia política en razón de género, por mencionar algunos.
La inclusión y el respeto a los derechos fundamentales de toda mujer debe ser tarea primordial de todo gobierno. La Organización de las Naciones Unidas señala que “la violencia contra las mujeres es el tipo de violación de derechos humanos más generalizada y extendida en el mundo”, por tal motivo es necesario emprender acciones que protejan a las mujeres en todos los ámbitos, desafortunadamente la violencia está más presente en el primer círculo que las rodea, tanto en lo laboral y tristemente en lo familiar.
La participación de las mujeres en espacios de representación popular o toma de decisiones ha ido aumentando sustancialmente, ahora contamos con paridad total en el Congreso y en la mayoría de los cargos administrativos en todos los niveles de gobierno, por lo que ahora contamos con 10 entidades gobernadas por mujeres: Aguascalientes, Baja California, Campeche, Chihuahua, Ciudad de México, Colima, Estado de México, Guerrero, Quintana Roo y Tlaxcala.
Es importante que las mujeres en los Congresos locales legislen con perspectiva de género para coadyuvar en el desarrollo político y contribuir en la toma de decisiones de otras mujeres, no sólo en candidaturas sino también en cargos donde la mujer incida para garantizar justicia y oportunidades de desarrollo.
Tuve la oportunidad de ser Diputada Local y trabajé por y para las mujeres de Yucatán. Logré importantes reformas a la ley orgánica del gobierno del estado y leyes electorales, esto con el fin de garantizar la paridad total en todos los niveles de gobierno, tanto estatal como municipal y judicial. De esta manera, existe en la Constitución local las reglas para garantizar la paridad de género en la asignación de candidaturas a diputados y de candidaturas para ayuntamientos. El Congreso del estado de Yucatán se integrará observando el principio de paridad de género, también se ordena que a la persona que ocupe la titularidad del Poder Ejecutivo del Estado observará el principio de paridad en la integración de su gabinete, de igual forma es aplicable para ayuntamientos. Asimismo, el Tribunal Superior de Justicia estará integrado por quince Magistradas y Magistrados y en su conformación se observará el principio de paridad de género.
A pesar de estos avances, las cifras son lamentables en cuanto a la violencia que vivimos las mujeres y, en especial, la protección de nuestros Derechos Humanos. El abuso sexual, la violencia familiar o el acoso son algunos de los delitos que vivimos constantemente en cualquier entorno y esa falta de seguridad limita nuestra participación activa en la vida pública.
Las mujeres se enfrentan a diferentes obstáculos a la hora de participar en la vida política. Hemos superado varios diques como el tema de las mujeres embarazadas que son discriminadas por su condición y no acceden a mejores oportunidades de empleo, es por ello que hay acompañarles como ciudadanas y darles el reconocimiento a todas las mujeres mexicanas que día a día buscan mejoras de vida. La mujer merece un trato igualitario en todos los sentidos, esta es tarea de todas y todos los que trabajamos en la creación de leyes.
El liderazgo de las mujeres está comprobado, hagamos de este país un mejor lugar para vivir y que mejor que con las mujeres en la toma de decisiones. Hagamos realidad poder contar con una mujer que nos guíe hacia un mejor país, sin división y con mejores trabajos y mayor seguridad para todas las mujeres de México.
El trabajo de nuestros órganos electorales favorece, de manera primordial, a las mujeres para acceder a puestos de elección popular mediante el acuerdo tomado en años recientes de obligatoriedad de los partidos políticos a postular candidaturas para grupos en situación de vulnerabilidad (Acciones Afirmativas), como el caso de las personas indígenas. Se establece que de los 21 distritos electorales en ocho estados de la República se dividirán en tres bloques de competitividad para los que se deberán postular al menos 11 mujeres distribuidas de forma paritaria, caso similar para las personas afromexicanas, en donde los partidos políticos deben postular al menos tres fórmulas para alguno de los 300 distritos electorales y una fórmula en cualquiera de las cinco circunscripciones, las cuales deben realizarse de manera paritaria para ambos géneros.
Porcentaje de mujeres por acción afirmativa (algunos ejemplos): Mujeres con discapacidad 3,275,000 (53 por ciento del total); Mujeres afromexicanas 1,297,000 (50 por ciento del total); Mujeres indígenas 11,900,000 (51 por ciento del total); Mujeres jóvenes 19,200,000 (50 por ciento del total); Mujeres adultas mayores 5,375,000 (50.5 por ciento del total).
Una democracia real sólo será posible cuando mujeres y hombres seamos cómplices en la toma de decisiones para México, de manera equitativa y responsable, participar sin hablar de minorías y ser capaces de organizarnos y colaborando eficazmente por el bien común.
Vaya un reconocimiento especial a todas aquellas mujeres que con su lucha histórica ayudaron a crear un país con mayores oportunidades para todas nosotras, gracias a ellas y su compromiso somos más las que hacemos este país empático y solidario, un país donde ser mujer se reconoce.
Kathia Bolio Pinelo es Secretaria de Igualdad y Desarrollo Humano del PAN.