Alerta por aditivo y Colorante Rojo No. 3

Noviembre 2025

Andrés Castro Cid

La Nación

De acuerdo con un ensayo publicado en la página Scielo “la modernidad trae cambios profundos en casi todos los ámbitos de información” y el ramo de la producción de alimentos industrializados no queda exento a esto.

Diversas agrupaciones como la Sociedad Mexicana de Inocuidad y Calidad para Consumidores de Alimentos, así como la Nutrition Source han alertado sobre los riesgosos cambios en algunos de los ingredientes de los alimentos procesados y ultraprocesados.

En el caso de la producción de alimentos ultraprocesados dicha modernidad trae consigo cambios que son nocivos para la salud de las personas. Empresarios de esta rama han explicado que el uso de los aditivos alimentarios que se añaden tiene como fin mejorar su sabor, color, textura y vida útil.

Es en este marco de alerta sobre los químicos añadidos, que es de gran importancia señalar que dicha práctica genera un riesgo real de enfermedades crónicas, como la afectación del microbioma intestinal, la pérdida de nutrientes naturales o puede ir más allá, como generar una vía para padecer enfermedades de alta gravedad que dependen también de los malos hábitos de cada persona (no dormir, comer mal, ser sedentario, fumar o beber alcohol en exceso).

De manera reciente, publicaciones en revistas y sitios web como Oxford Academic, Profeco, Houston Methodist o MDPI han subrayado y enfatizado sobre el alto peligro del muy utilizado Colorante Rojo 3.

Se trata de un colorante sintético derivado del petróleo y que está muy presente en golosinas, alimentos, helados, leche de sabor, bebidas alcohólicas, gelatinas, especialmente en alimentos dirigidos a niños y hasta en medicinas, y las afectaciones para la salud ya han sido señaladas y comprobadas científicamente. Investigaciones recientes asocian el uso de eritrosina (Colorante Rojo No. 3) con hiperactividad, alergias y hasta riesgo de cáncer. De ahí que ha sido prohibido su uso en algunos países de la Unión Europea, en Estados Unidos y Perú, sólo por dar un ejemplo.

 

México en el letargo

Las autoridades federales encargadas de riesgos sanitarios duermen el sueño de los justos, como se dice coloquialmente, pues a pesar de que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) ya señaló que este químico supera la ingesta admisible diaria en productos que se venden en México, dio un plazo de dos años para que las empresas reformulen sus productos y así eliminen este colorante.

Cambiar y mejorar hábitos de consumo

Frente a este sorprendente letargo de la COFEPRIS, el ciudadano puede tomar medidas sencillas, pero importantes como son mirar y revisar con atención las etiquetas de los alimentos que se quiera consumir y evitar los productos con Colorante Rojo No.3 y la mejor medida de todas es cambiar los hábitos de consumo.

Es decir, ir al mercado de la colonia y elegir productos frescos y sin procesar para, de esta forma, ingerir alimentos con una menor exposición a conservantes y aditivos, sin proceso de envasado, obtener el aporte de vitaminas, minerales y fibra, especialmente en la alimentación infantil.

Es importante añadir que algunos productos que contienen este colorante, principalmente, son las galletas con malvaviscos de colores (rojos), las gelatinas de un rojo intenso y el polvo para preparar atole de fresa.