Delincuencia, aumento se debe a un mal diagnóstico del gobierno

Agosto 2022

Andrés Castro Cid

La Nación

Adolescente es asesinado a balazos en Chilpancingo, era repartidor de pollo. Un muerto y seis mujeres heridas, el saldo de una emboscada en región triqui de Oaxaca. En Michoacán ejecutan a empresario afuera de un bar. Lo anterior son notas de un solo portal de noticias que dejan claro el alarmante clima de inseguridad que se vive en el país, mientras que el titular del Ejecutivo polemiza con declaraciones como emitir acuerdos para que la Guardia Nacional dependa por completo de Secretaría de la Defensa Nacional, aunado a la necedad de mantener la política de “abrazos y no balazos”.

Para hacer un análisis sobre la situación de inseguridad en el país, La Nación conversó con el diputado federal, Román Cifuentes Negrete, quien integra la Comisión de Seguridad Ciudadana en el Palacio Legislativo de San Lázaro.

En un primer momento, el legislador panista criticó que la frase “abrazos y no balazos” surge de un diagnóstico simplista, erróneo, pero sobre todo demagógico que hace el presidente de la República del fenómeno de la delincuencia.

Insistió que decir “abrazos y no balazos” es renunciar a atender un fenómeno muy complejo que requiere que el Estado, en este caso, el jefe del Ejecutivo, como responsable de las Fuerzas Armadas, coordine acciones en materia de seguridad, convoque al Consejo Nacional de Seguridad Pública, a los gobernadores, que asuma una actitud seria, honesta, responsable y de compromiso frente a este fenómeno.

Añadió que, como bien lo señala la Constitución, la seguridad pública es una función a cargo de los tres órdenes de gobierno, en la cual estos tres órdenes tienen que trabajar en labores de coordinación operativa, en inteligencia, multiplicar recursos, esfuerzos y talento, pero, sobre todo, multiplicar la posibilidad de trabajo, de campo de acción y, como tal, en una mayor cobertura atender el problema de manera seria y responsable.

El diputado panista lamentó que lo que vemos es que el Estado, este Gobierno federal, renunció a su tarea de procurar la seguridad y el bienestar de todos los mexicanos, “este presidente prefiere la demagogia, salirse por la tangente y, antes que cualquier otra cosa, le tiene miedo a la delincuencia”.

Al abordar las declaraciones del presidente en el sentido de que “los delincuentes son seres humanos que merecen nuestro respeto,” el diputado federal destacó que López Obrador no puede poner en el mismo nivel las garantías de una víctima frente a las de un delincuente. “Aquí se tiene que usar la fuerza del Estado para castigar, para perseguir, prevenir o sancionar cualquier delito y se le debe dar la atención debida a las víctimas de los delitos”.

Agregó que se deben atender, procurar y salvaguardar los derechos de todos los ciudadanos, pero cuando se manda una premisa en la cual pareciera que el derecho de los delincuentes es mayor al de las personas se manda una señal equivocada.

El legislador por Guanajuato precisó que quien tiene el monopolio del uso de la fuerza es el Estado y es el único que puede usar la fuerza de manera legítima y ésta tiene que usarse para prevenir, para perseguir a los delincuentes que hoy en día no son blancas palomas; se está frente a una delincuencia organizada más estructurada, con mayores recursos de desplazamiento, con un mayor poder de armamento y este presidente manda mensajes que nos deja muy mal parados como sociedad.

Destacó que a los cuerpos de seguridad se les lastima cuando el que debe ser el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, el responsable de las estrategias de seguridad, utiliza este tipo de frases, que prefiere darles abrazos.

Román Cifuentes aclaró que no se pide un Estado represor, arbitrario, injusto o que arrase, lo que se pide es que ese monopolio del Estado mexicano para el uso de la fuerza, al tratarse de la delincuencia, se ejerza como tal, para prevenir, sancionar y perseguir a quien causa daño, a quien lastima y amenaza a la sociedad.

“Esto nos lleva a reflexionar y preguntar: ¿qué provoca el Gobierno federal con esos mensajes? Esto es algo delicado y esto es lo que el Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputados pone en el centro del debate,” apuntó.

La nación

Nosotros en el PAN, destacó, esperamos que se corrijan esos errores, no se puede seguir con el mal diagnóstico de este gobierno, el querer combatir la inseguridad con frases domingueras que le salen en la mañanera.

El político panista señaló que los más vulnerables ante un fenómeno delictivo tan complejo son, precisamente, las autoridades municipales y las autoridades estatales y ¿ahí qué propone el PAN?

“Propone que se regresen recursos, los que le quitaron a las policías municipales, a las estatales, recursos que se daban a través del FORTASEG. ¿Dónde están esos recursos? Estos recursos están en un aeropuerto sin vuelos, en una refinería que no refinará nada, en un Tren Maya que deforesta un ecosistema”, señaló.

Cifuentes Negrete precisó que estos recursos les correspondían a las policías municipales, a las policías estatales, y debían servir para capacitación, para equipamiento, para tener mejores elementos de seguridad y para llevar a cabo la tarea de proteger a los ciudadanos a partir de sus capacidades.

Otro punto a revisar es que la coordinación debe ser más efectiva, con un trabajo conjunto en materia operativa que permita la suma de policías municipales, estatales y federales, tener un esquema de mayor despliegue, cobertura y, con ello, garantizar una mejor protección territorial y por zonas a todos los ciudadanos, con exámenes de control de confianza, con elementos y policías confiables, añadió.

Otra propuesta del PAN es la despolitización del uso de las fuerzas armadas, de los recursos de la Guardia Nacional. “Parece que a este presidente el poder le sirve para ejercer venganzas, revanchas, es decir, en tal estado no gobierna mi partido, en otro me va mal en las encuestas o no me quieren, pues ahí les niego el apoyo”.

Se tiene que poner a la Guardia Nacional al servicio de los estados y de los municipios para que, en coordinación operativa, en materia de inteligencia, sea más efectiva, apuntó.

Acción Nacional también exige que exista una real y efectiva coordinación en materia de operatividad, de intercambio de inteligencia y con esto dar el paso efectivo para revertir de mejor manera este esquema de inseguridad.

“Este presidente debe entender que se debe gobernar para todos, asumir estrategias ajenas al revanchismo político. Este fenómeno es tan delicado que lo mismo afecta a estados donde gobierna un partido ajeno al gobierno que en los estados donde gobierna Morena”.

En este contexto, Román Cifuentes consideró que de ahora en adelante los ciudadanos deben fijarse bien en cuáles son los partidos y los políticos que hacen propuestas serias, racionales, que entienden este fenómeno y se comprometen de una manera real en brindar las condiciones idóneas de seguridad para la sociedad.

El otro punto importante a entender, aseguró, es que la prevención es tarea de todos y las familias se tienen que involucrar, también las escuelas deben jugar un papel efectivo, las organizaciones de la sociedad deben participar y tiene que existir un compromiso real en esquemas de prevención. “La prevención debe ser un gran esquema de masas, de trabajo que involucre a los jóvenes, al deporte, la cultura, a las escuelas, a las universidades y empresas”.

Aseguró que el PAN debe ser incisivo en el discurso, reiterar sus propuestas, plantear las alternativas, ya que con el mal diagnóstico, simplista y demagógico de esta administración federal, se ha hecho que un fenómeno complejo y doloroso para toda la sociedad se haga cada vez más difícil de atender.

Finalmente, el legislador por Acción Nacional aseguró que hay que conservar la fe y la confianza en nuestras Fuerzas Armadas, en muchas de nuestras policías estatales, que, con hombres y mujeres en activo, de convicción, vocación, defienden los bienes, la integridad, la seguridad de los ciudadanos, trabajan y exponen su integridad, su vida para salvaguardar los derechos y la vida de todos los demás ciudadanos.

La nación