Discursos Parlamentarios de Abel Vicencio Tovar

Febrero 2023

Andrés Castro Cid

La Nación

El libro Transformando a México. Discursos Parlamentarios de Abel Vicencio Tovar es una obra en la que María Elena Álvarez Bernal, por medio de un gran trabajo de compilación, concentra los discursos parlamentarios de quien fue un gran “tribunista”; son posicionamientos poderosos por su contenido, inteligentes, bien estructurados y certeros, los expresados en Tribuna por este icono panista.

El 31 de enero, en el Comité Ejecutivo Nacional del PAN, se llevó a cabo la presentación de estos textos, evento moderado por Benjamín Farfán, director administrativo de la Fundación Rafael Preciado Hernández, al que asistieron diputados, senadores, secretarios del CEN y destacados militantes panistas que han sido marcados por el trabajo y capacidad oratoria de don Abel Vicencio Tovar.

En el presídium estuvieron presentes María Elena Álvarez Bernal, viuda de Abel Vicencio Tovar; la secretaria general, Cecilia Patrón; el director de la Fundación Rafael Preciado Hernández, Julio Castillo; el director de la Fundación Miguel Estrada Iturbide, Jorge Lara, quien también fue el presentador del libro, y la vicepresidenta de la Mesa Directiva en San Lázaro, Noemí Luna, así como las diputadas federales, Carolina Beauregard, Margarita Zavala y el diputado Jorge Triana Tena.

En su mensaje, la diputada Carolina Beauregard recordó que Vicencio Tovar aseguraba que todo militante o dirigente del PAN deberá “poseer alma de cristal, corazón de oro y fortaleza de hierro”, lo cual refleja la esencia de don Abel.

Además, señaló que don Abel Vicencio fue un destacado jurista, abogado postulante, servidor público e ilustre académico de la UNAM, características similares a las del fundador de Acción Nacional, Manuel Gómez Morin; “todo ello lo convirtió en uno de los mejores tribunos de Acción Nacional en la Cámara de Diputados y estos discursos cobran relevancia ante la versión renovada de ese antiguo régimen que hoy se llama Morena”.

En su oportunidad, Margarita Zavala resaltó que a don Abel Vicencio le correspondió ser el coordinador del PAN en la legislatura de 1988 a 1991, de manera particular en el momento del fraude electoral, en donde el país cayó en una encrucijada, ya que se tenía que decidir el camino para México en la toma de posesión, es decir, el camino de la violencia o el de la paz, “y eligió el paciente y valiente camino de la paz y del derecho para llegar a la democracia”.

Desde su guía, aseguró la legisladora, la oposición negoció la primera reforma electoral, la transformación social, pues a partir de la reforma de 1989 surgieron las otras, porque antes no existía instituto electoral alguno, el Tribunal Electoral era parte de una cosa medio desconocida jurídicamente, además no tenía facultades, “mucho menos existía una credencial con fotografía ni padrón electoral, a partir de la reforma del 89 iniciaron las luchas por las libertades”.

La nación

Por su parte, Julio Castillo López, director de la Fundación Rafael Preciado Hernández, aseguró que existen dos aspectos que marcaron la vida y trabajo de don Abel: 1. El concepto de gradualidad y 2. El hacer al PAN institución.

En el tema de institucionalidad, explicó, desde la presidencia del PAN y desde la Secretaría General, fue una pieza fundamental para que Acción Nacional pasara de ser un grupo de amigos y de compañeros a ser una institución formal, a través de impulsar la promoción de las mujeres, de los jóvenes, refundar cada uno de los distritos electorales y establecer la práctica de la normatividad interna.

“El entendió que el cambio en México sería gradual y junto con personajes como el Maquío, don Luis H. Álvarez, Carlos Castillo Peraza, Diego Fernández de Cevallos, entre otros, se construyó la ruta gradual de la democracia y de las instituciones”.

En tanto, Jorge Triana Tena, diputado federal, recordó también la importancia de 1988, año crucial donde le tocó a Vicencio Tovar representar en Tribuna, no sólo al PAN, sino a toda la oposición y a millones de mexicanos que se sentían agraviados por haber sido vulnerada la voluntad popular en aquella ocasión, a través de un sistema electoral injusto.

Insistió en que el PAN se ha caracterizado por ser un partido forjador de tribunos, de oradores de primera línea y hoy se debe retomar esa tradición, esa escuela y, para ello, es fundamental estudiar esos discursos de don Abel.

Jorge Lara Rivera, director de la Fundación Miguel Estrada Iturbide, aseguró que la importante preparación académica de don Abel lo convirtió en un hombre que se caracterizó por sus intervenciones y debates sólidos, siempre fundamentados con rigor; “él conjugaba las tres virtudes del buen orador que refieren Aristóteles y Cicerón: el Ethos, congruencia impronta e imagen a toda prueba; un Logos, que es el contenido intelectual y un Pathos que tocaba fibras sensibles con sus compañeros y opositores. Fue un parlamentario de peso completo”.

Para cerrar el evento, el Presidente Nacional del PAN, Marko Cortés, consideró que no se puede hablar de construir el futuro sin voltear al pasado. “Se debe volver a las raíces para recordar lo que fue el Partido, no cometer errores, aprender de aciertos y ver los cimientos que sostienen a la institución”.

Insistió en que no se puede concebir hoy al país sin la lucha de muchas personas y eso, precisamente, es lo que está en riesgo: “la gradualidad en el avance democrático y de libertades que se construyeron desde la oposición y desde nuestros dos gobiernos”.

La nación
La nación